Y porqué "el otro Machu Picchu"?.
Porque La proporción que visita MAPI y el Huayna Picchu es enorme. La inmensa
mayoría se queda con MAPI y no saben cuánto se pierden. Ante todo, Huayna
Picchu tiene una altura de 2667 msnm, en lengua quechua significa "montaña
jóven". Es conveniente saber, que para ingresar a Huayna Picchu hay que
reservar el ticket con tiempo, hay dos turnos de subida (8 hs y 10 hs) y cada
uno con 200 visitantes (400 diarios). 75 dólares es el precio de la entrada y
se puede reservar por internet. En el ingreso, se firma el libro de visitantes
que se firma también a la salida. Sirve de control a las autoridades para
verificar que nadie ha tenido ningún percance. Yo lo
había hecho en una oportunidad, y en esta segunda repetí la experiencia salvo
que en esta ocasión, decidí ir a la Gran Caverna o Templo de la Luna. Desde la
cima del Wayna, el recorrido es hasta allí es de 1 hora y media.
Esta es la entrada al Huayna Picchu, se llega facilmente, siguiendo el sendero que se encuentra detrás de la Roca Sagrada en la parte norte de Machu Picchu. Una hora es lo que toma llegar a la cima de Huayna.
Un trámite imposible de eludir, la firma del libro de ingreso a Huayna Picchu.
En esta oportunidad luego de haber subido a lo alto del Huayna, tomé rumbo a la Gran Caverna comenzando por esta "bajadita".
Sonrisa a tope por lo que significa este comienzo.
La bajada inicial desde otro angulo, restan muchos escalones por bajar.
Lo dicho...son varios los escalones por bajar, no es peligroso pero conviene ir con precaución.
Cada escalón ha sido tallado en la roca viva, solo requiere atención...no lo olviden.
No es otra escalera, es la misma vista desde su final para apreciar el declive del terreno.
Ahora si, este es otro tramo de la escalera...aunque con más declive.
Aquí también se encuentran escaleras de madera para ayudar un descenso, que sería peligroso de otra manera.
Y si...finalmente se terminan los escalones, para adentrarse en este hermoso sendero.
jajaja...poco dura el sendero, otra nueva escalera que descender!!!
Fin del sendero y ya en el ingreso al predio que ocupa la Gran Caverna o Templo de la Luna.
El Templo de la Luna, data de hace 1500 años, re descubierto en 1936.
La alegría de haber llegado a este punto tan bello, la Gran Caverna, 1 hora y media como mucho es lo que demanda.
Los muros son de carácter claramente ornamental, incluyen falsas portadas y nichos trapezoidales de doble y triple jamba. Se cree que pudo haber tenido usos funerarios.
Templo de La Luna, es el nombre por el que se le conoce,
pero en verdad no hay elementos que confirmen la veracidad del nombre. Muchas
de las construcciones del Huayna, podrían tener un carácter ritual,
especialmente funerario y en particular el “Templo de La Luna”.
En el centro de la cueva está este trono tallado en la roca. Junto al trono están los pasos que conducen a una parte más profunda en la cueva. Se piensa que las cuevas fueron utilizadas para albergar momias. El templo de la luna data del 1500.
Vista lateral de la caverna desde el exterior.... La vistas que le rodean son de una belleza increíble.
Hito que marce este punto como parte del "Santuario Histórico de Machu Picchu".
Sitio alguna vez utilizado con fines ceremoniales, saqueados en tiempos de conquista.
Fuera de la caverna y hacia uno de los lados, a unos pasos, otra maravilla arquitectónica.
Así como registré mi ingreso, cumplí también con registrar mi egreso.
Y ya de regreso a Machu Picchu, una imagen panorámica para nuestra satisfacción.
Y ahora pasamos la página, hacia otra de las excitantes experiencias que se pueden vivir en esta región.
Desde la Machu Picchu, uno puede ver una montaña en la que en su cima, ondea la bandera del Tahuantisuyo, esa montaña es el Putucusí.
Putucusí, en quechua significa "Montaña Feliz", es una montaña de forma circular situada en el lado opuesto (noreste) del Urubamba (Vilcanota) río a Machu Picchu.
Alcanza los 2.560 metros sobre el nivel del mar en su punto más alto, y que ofrece unas vistas épicas de Machu Picchu y los alrededores del valle del río Urubamba.
Putucusí, Machu Picchu ("Pico Viejo") y el Huayna Picchu ("Pico Jóven") son considerados los apus o montañas sagradas, por el pueblo quechua local.
Son pocas las personas que suben el Putucusí, porque no saben que se puede subir y otro porque no conocen la entrada de acceso ( y si supieran que es muy agotador subirlo, sería otro motivo. :).
Pese a lo dicho al comienzo, no es tan complicado encontrar la entrada. Solo basta seguir la vía del tren en el sentido contrario al que se llega a Aguas Calientes, y a 10 minutos andando....
....nos encontramos con la entrada y en ella, esta escalera ascendente.
Se continúa el ascenso por la escalera, desde la base se calcula una hora y media de ascenso.
Varios senderos empedrados como complemento a las escaleras, hacen suave el ascenso. En esa ocasión, la lluvia era mi compañera.
Un selfie del ascenso.
Ups.........y eso? Termina la escalera de piedra y a continuación esta de madera.
Esta caseta nos pre lo bueno.....está muy cerca.
He aquí lo "bueno"...esta escalera así como se ve, tiene una altura equivalente a un edificio de cinco pisos y está dispuesta en un declive de 80°.
Desde la base, se aprecia lo empinado de la escalinata. Recomiendo, llevar mochila para no tener las manos ocupadas en otra cosa que no sea, agarrarse del cable de acero a la izquierda...
Ah, y también una buena dosis de paciencia.
Ya casi en el último tramo.
Vista impactante de la montaña circundante.
jajaja...todavía queda esta otra por subir, aunque esta mucho más corta.
Desde la posición, se puede ver el río Urubamba.
Y otra escalinata!!! En cierta forma es de agradecer que estén, sin ellas sería muy muy difícil realizar el ascenso en una hora y media.
El maravilloso contrastes de la naturaleza y el efecto de la humedad sobre la madera.
Última escalinata, pero esta es en bajada.
Finalmente .....este sendero para descansar un poco después de la trepada.
Vista impresionante de las montañas solo cortadas por el zigzagueante curso del Urubamba.
Aquí una vista frontal para apreciar más la belleza y fuerza del Urubamba.
Y luego del descanso que nos regala el sendero, a seguir ascendiendo. Esta vez...sorteando los cientos de escalones de piedra que conectan con la cima.
Rodeada por una inmensidad de roca y selva, emerge el pueblo de Aguas Calientes.
Ya sin lluvia...el calor se hizo presente en el ascenso.
La lluvia que hace una pausa..y las nubes nos regalan esta hermosa visión.
Aguas Calientes desde otro punto del camino de ascenso.
Un obsequio de color entre tanto verde.
Pocos metros para llegar a la cima...último tramo de una experiencia increíble.
Y finalmente la cima...y el mástil improvisado en el que habitualmente ondea la bandera.
Vista privilegiada de la Machu Picchu a la distancia.
Ninguna persona al llegar, lo dicho..no es un sitio muy visitado.
La naturaleza con otro de sus coloridos regalos para la vista.
Mi recuerdo de la llegada al punto más alto del Putucusí.
Vista desde el Putucusí de la parte alta de Machu Picchu.
Y ahora...otra vista de la parte baja de Machu Picchu.
Más regalos de la naturaleza...color..aroma..
Mi infaltable foto panorámica para disfrutar la grandeza y magnificencia de la región.
Ya de regreso...esta maravilla.
Estos líquenes secos acompañaron parte de mi camino.
Aguas Calientes y el Urubamba en el regreso...
Comienzo del regreso....
El puente de madera al regreso.
Se acaba el sendero y comienzan las escalinatas....bajarlas es una tarea de más cuidado que el empleado en el ascenso.
Ahora se entiende lo que comenté en la foto anterior???
Eso sí, la foto anterior es para dar una muestra del declive, recomiendo bajarlas al revés.
El contraste maravilloso que dan los hongos pegados a la madera.
Otro tramo del descenso por una escalinata.
Nuevamente el Urubamba con su presencia sobrecogedora.
Y finalmente la primer gran escalinata antes de la salida.
La puerta de salida...atrás quedan escalinatas, escaleras, senderos todos y cada uno igualmente bellos y una cima que regala una vista única de Machu Picchu.
Poco para llegar a la salida y agradecido por conocer el sitio.
Y finalmente...la salida y camino de regreso a Aguas Calientes. Una experiencia única que recomiendo hagan sin dudar. Espero haber servido de inspiración para que tomen la decisión.
